El diseño universal, la versatilidad de la estructura del proyecto y sus posibilidades de personalización permiten que In-TIC se adapte a las capacidades y a las necesidades específicas de diferentes colectivos de personas, pudiendo ser utilizado por un gran número de usuarios. En especial, su desarrollo se ha centrado prestando mayor atención a personas con diversidad funcional con distinto grado de afectación a nivel cognitivo, físico, sensorial y social.
En una primera fase, el proyecto se desarrolló con el colectivo de personas con parálisis cerebral y el de personas mayores. Posteriormente, en una segunda fase, el proyecto se validó y adaptó con personas con Trastornos del Espectro del Autismo (TEA). Además la aplicación In-TIC puede ser empleada por otros colectivos de personas con discapacidad (física, visual…) o sin discapacidad, ofreciendo una personalización en el entorno del ordenador o del teléfono móvil.